domingo, 8 de diciembre de 2013

Bitácora 30. El razonamiento. Clases de razonamiento o inferencias mediatas: c) Analogía


El argumento analógico es quizá uno de los que más utilizamos en la vida diaria, pues es común que a partir de experiencias pasadas tratemos de prever lo que sucederá en el futuro...



APERTURA


Disfruta la canción de Andrea Bocelli y Martha Sanchez, "Vivo por ella". Después identifica los dos juicios más importantes que al relacionarse permitan la conclusión. 



Premisa 1: La protagonista es ella.

Premisa 2: Ella canta en mi garganta mis penas.

Conclusión: Ella se llama música.



ACTIVIDADES DE APRENDIZAJE.

Así, por ejemplo, una persona puede inferir que la compra de cierto par de zapatos nuevos le dará buen resultado sobre la base de que otros zapatos del mismo modelo y la misma marca también lo hicieron, o que el nuevo CD de su cantante favorito le gustará, puesto que los dos anteriores que compró le encantaron.

Podemos definir el argumento analógico en los siguientes términos:

El argumento analógico es aquel en el que a partir de la semejanza establecida en las premisas entre dos o más objetos en uno o más aspectos, se concluye la similaridad de otro (u otros, aunque sin llegar a la totalidad) en algún otro aspecto.

Es importante saber que no todos los argumentos analógicos se refieren exactamente a dos cosas, o exactamente a una sola propiedad. A margen de estas diferencias numéricas, todos los razonamientos analógicos tienen la misma estructura.

La estructura del argumento analógico es la siguiente:
1) a, b, e y d tienen todos las propiedades p y q.
2) a, b y e tienen todos la propiedad r.
Por lo tanto, probablemente d tiene la propiedad r.

Pongámosle contenido a la estructura:
1) Los cuentos "Berenice", "El gato negro", ''La caída de la casa Usher" y "La caja oblonga" son de Edgar Allan Poe.
2) Los cuentos "Berenice", "El gato negro" y "La caída de la casa Usher" me han gustado mucho.
Por lo tanto, probablemente "La caja oblonga" me gustará mucho.

Como podemos observar en el ejemplo, a partir de mis experiencias pasadas con la lectura de los cuentos de Edgar Allan Poe infiero que si leo alguno nuevo de este autor también me gustará, a partir de que todos los escribió el mismo autor.

Algo que no debes olvidar es que, al igual que en el argumento inductivo, la conclusión de un argumento analógico es siempre probable. El hecho de que los objetos comparados tengan características en común es relevante para afirmar la verdad de la conclusión, pero es lógicamente posible que el objeto nuevo no cumpla con la propiedad que le adjudicamos. Es decir, lógicamente es posible que lea el cuento "La caja oblonga" y resulte ser aburrido. La conclusión de un argumento analógico no pretende ser necesaria, sino tan sólo tener más o menos probabilidad de ser verdadera.


Argumento analógico y analogía.

Es importante no confundir ambos conceptos. Una analogía es una comparación y no implica un argumento analógico. Frecuentemente las analogías son utilizadas por quien escribe un texto para proporcionar descripciones más vivas a sus lectores sin que ello implique que exponga un argumento. Veamos un ejemplo de analogía:

" ... Ios libros (de historia) no describen los cambios ni muestran la relación entre un tipo de suceso y otro. Los textos del siglo XIX son enciclopedias más que libros de historia. Sus vastos índices contienen referencias a cualquier cosa bajo el sol, pero no hay conexión entre una cosa y otra. Los sucesos se presentan aislados bajo encabezados en negrillas, como islas en algún archipiélago donde no se hubieran inventado aún las canoas”.

En este ejemplo tenemos una analogía pero no un argumento analógico. La analogía también se usa en las explicaciones donde algo no familiar se hace inteligible comparándolo con alguna otra cosa que es más familiar y con la cual tiene ciertas similitudes. Por ejemplo:

"La ciencia se construye con hechos, como una casa con ladrillos. Pero una colección de hechos no es más una ciencia de lo que una pila de ladrillos es una casa".

Es importante destacar que a veces no es fácil determinar cuándo se está elaborando sólo una analogía, es decir, una comparación sin pretensiones argumentativas y cuándo se trata de un  argumento analógico; para determinarlo tendremos que analizar cuidadosamente el contexto.

Evaluación del argumento analógico.

Ya vimos que para evaluar un argumento analógico hablaremos no de validez, sino de corrección. Así, diremos que un argumento analógico es correcto si las propiedades que se establecen como eje de la analogía son relevantes para arribar a la conclusión, y además si se antepone la palabra probablemente a su conclusión.

Como podemos observar, al igual que en el argumento inductivo, en el argumento analógico el hecho de que su conclusión sea probable no lo convierte en un argumento malo o incorrecto, pues no todos los argumentos buenos tienen que cumplir con el requisito de necesidad en la conclusión; así, se puede tener un argumento bien hecho aun cuando su conclusión sea probable. Entender esto es de suma importancia al momento de evaluar los argumentos de otros y los nuestros.

Con base en lo antes expuesto, el argumento analógico se puede caracterizar de la siguiente manera:

•              Sus premisas son resultado de observaciones o experiencias.
•              La conclusión establece un caso particular (o varios, pero sin llegar a generalizarlos todos).
•              Lo correcto de un argumento analógico depende de la estructura y el contenido.
•              La conclusión de un razonamiento analógico no pretende ser necesaria, sino sólo tener más o menos probabilidad de ser verdadera. El hecho de que los objetos comparados tengan características relevantes en común es importante para asentar la verdad de la conclusión. Sin embargo, es lógicamente posible que el objeto nuevo no cumpla con la propiedad que le adjudicamos a pesar de las propiedades significativas que comparta con el resto.

Argumento analógico y falacia de falsa analogía.

Se incurre en esta falacia cuando en un argumento analógico los individuos comparados se parecen en propiedades insignificantes y son diferentes en aspectos significativos para la conclusión y, por tanto, esta última no se sigue como consecuencia, pues para que funcione el argumento analógico se requiere que las propiedades comparadas sean relevantes o significativas respecto de lo que se quiere concluir. También se incurre en esta falacia cuando en la conclusión de un argumento analógico no se antepone la palabra probablemente. Revisemos un caso en el que se comete esta falacia:

"¿Por qué deberíamos compadecemos de los nativos americanos que fueron arruinados cuando nuestra gran civilización fue construida? Puede ser que ellos hayan sufrido injusticias, pero después de todo, tú no puedes hacer una omelet sin romper unos cuantos huevos".

Reconstruyamos el argumento:
a) Los huevos y los nativos americanos fueron dañados (arruinados).
b) El daño de los huevos está justificado al dar lugar a algo superior como la omelet.
Por lo tanto, el daño a los nativos americanos está justificado, pues dio lugar a algo superior como lo es la actual civilización.

Observamos aquí supuestas semejanzas con base en 
las cuales se afirma la conclusión. Sin embargo, acerca de ellas cabe preguntamos:

a) ¿Son semejantes los huevos y los nativos americanos?
b) ¿Son semejantes una omelet y una gran civilización?
c) ¿Se pueden dañar en el mismo sentido los huevos que a los nativos americanos?

En suma, ¿son pertinentes y relevantes las semejanzas que se establecen en el argumento?


ACTIVIDADES DE CIERRE.


Construye tres argumentos analógicos, es decir, ponle contenido a la siguiente estructura:
1) a, b, c y d tienen todos las propiedades p y q.
2) a, b y c tienen todos la propiedad r.
Por lo tanto, probablemente d tiene la propiedad r.


Ejercicio 1


Premisa 1)  Javier y Susana pasaron todo el día estudiando.

Premisa 2)  Susana sacó buenas calificaciones.

Conclusión:  Probablemente Javier sacó buena calificaciones.



Ejercicio 2

Premisa 1)  Mi abuelo materno y paterno tenían ojos de color claros.

Premisa 2)  Mi mamá y papá tienen ojos color aceituna.

Conclusión:  Probablemente mis hijos tengan ojos de color claros.


Ejercicio 3

Premisa 1)  En el camión que venía, iba muy rápido y era ruta 66.

Premisa 2) El camión del otro lado pasó medio veloz y también era ruta 66.

Conclusión:  Probablemente todos los camiones de la ruta 66 son rápidos.


Lee cuidadosamente la información que se te ofrece y reconstruye el argumento analógico presente en ella de acuerdo con la estructura que ya conoces. En todos los casos se omite la conclusión, por lo que tendrás que inferirla y escribirla.

Ejercicio 4

He sacado copias 10 veces en la papelería que está enfrente de la escuela y las 10 veces se han tardado mucho. Ya no voy a regresar a esa papelería.

Por lo tanto:  En la papelería que está enfrente de la escuela son muy lentos.


Ejercicio 5

El señor Núñez ha contratado en dos años a cuatro ingenieros (A,B,C y D) egresados de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México, quienes resultaron sumamente eficientes y responsables. Debe ahora contratar a otro ingeniero, y desea que los aspirantes sean egresados de esa misma universidad.

Por lo tanto: Los ingenieros  de la Universidad Nacional Autónoma de México son sumamente eficientes.


Ejercicio 6

Beatriz y Rosa padecen gastritis. Beatriz, que tiene mucho tiempo ya con esa enfermedad, ha experimentado severos malestares en el estómago cada que come picante, y por ello recomienda a su amiga que lo evite.

Por lo tanto: Comer picante provoca muchos malestares.


FUENTES DE CONSULTA:

Hernández Gabriela y Gabriela Rodríguez, Lógica ¿para qué? Argumenta, debate y decide racionalmente, México, Pearson Educación, 2009, pp. 66-91.

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